El ingenio de los fanaticos del Automovilismo Argentino hizo que el folclore deportivo diera una noticia que sorprendió inclusive al protagonista que es nada menos que el Piloto de Fórmula 1 Franco Colapinto.
El sorpresivo y hasta divertido hecho sucedió días atrás en la Ciudad Bonaerens de Luján.

Así alguien -en el anonimato- aprovechó que nadie lo veía para rebautizar a la intersección de la calle 25 de Mayo y Avenida Nuestra señora de Luján con otros nombres.Pegando una calcomanía sobre las designaciones originales en los carteles de nomenclatura, esas arterias pasaron a llamarse -al menos por un fin de semana- Franco Colapinto y James Vowles.
Uno es la máxima promesa del automovilismo argentino a nivel mundial habiendo debutado con éxito en la Fórmula Uno y el otro es el responsable del equipo de la escudería Williams.
Lo cierto es que en medio de los peregrinos y los colectivos saliendo de la improvisada Terminal de la ciudad de Luján la impronta del anónimo fanático logró la repercusión esperada despertando la atención no sólo de medios de Pilar ,de donde es oriundo el joven piloto, sino también de redes sociales y medios nacionales que rápidamente se hicieron eco de “la travesura”.
Con un poco de alcohol etílico, la calco fue despegada y las calles en cuestión recuperaron su rutinario ritmo aunque por cuarenta y ocho horas tuvieron una nomenclatura con mucha adrenalina como es característica de las pistas de la Fórmula Uno.