En horas del mediodía se conoció la triste noticia del fallecimiento del Padre Eduardo Herrera, párroco de la Parroquia San Pedro, perteneciente a la diócesis local.
El sacerdote, recordado por su compromiso pastoral y su cercanía con la comunidad, fue compañero de seminario y de camino sacerdotal de muchos colegas, quienes hoy expresaron profundo dolor y esperanza cristiana ante su partida.
“El Señor tenga misericordia de su alma y brille para él la luz que no tiene fin”, expresaron desde la diócesis, bajo el amparo de Nuestra Señora del Pilar Aparecida, a quien tanto amó.
Sus hermanos sacerdotes, junto a la comunidad de San Pedro, elevaron oraciones por su eterno descanso y acompañaron con fe a sus familiares y feligreses, reafirmando que “nuestra esperanza es el cielo”.
«Ánimo y fortaleza a la querida comunidad de San Pedro. Unidos en la oración”, concluye el mensaje emitido por la diócesis.
