El joven acusado de cometer un brutal crimen en San Vicente fue imputado por el delito de homicidio simple. Se trata de Franco, un peón rural de 19 años, quien habría asesinado a su compañero de tarefa, Luis Batista Da Silva, de 48 años, a fines de julio.
Según fuentes judiciales, la víctima fue vista por última vez durante la noche del domingo 27, mientras caminaba junto al joven acusado. Vecinos del barrio 25 de Mayo relataron que ambos se dirigían hacia una zona de plantaciones de té, donde solían reunirse a beber.
Este lunes, el sospechoso fue trasladado desde la comisaría local al Juzgado de Instrucción de San Vicente, donde se realizó la audiencia indagatoria. El magistrado Gerardo Casco le informó sobre los elementos que lo vinculan con el crimen. Aunque tuvo la posibilidad de declarar, decidió abstenerse.
Con las pruebas recolectadas hasta el momento, se dictó la imputación preventiva por homicidio simple. El acusado fue trasladado nuevamente a la comisaría local, donde permanecerá detenido hasta que se definan nuevas medidas en su proceso judicial.
Por otro lado, aún no comenzó la ronda de declaraciones testimoniales. La esposa de la víctima fue una de las primeras en aportar información al tomar conocimiento del hecho. Se espera que esta semana se notifique a testigos clave para reconstruir los últimos movimientos de Da Silva y su vínculo con el agresor.
Desde el entorno familiar señalaron que la relación entre ambos habría surgido en contextos de consumo de alcohol. Nélida Diniz Rabela, cuñada del fallecido, comentó que su hermana conocía al acusado y que “la amistad nació entre la bebida”.
Según testimonios recogidos, la noche del crimen ambos habrían estado tomando juntos. La familia sospecha que discutieron bajo los efectos del alcohol y que el joven, en un estado alterado, habría cometido el crimen.
El caso causó conmoción en la comunidad. Efectivos policiales que intervinieron en la detención relataron que el acusado, visiblemente alterado, sostenía que “tenía que hacerlo” porque su amigo “era el diablo”.
Fuente: El Territorio
