Cada 3 de diciembre se celebra en Argentina el Día del Médico. Es una jornada que reconoce la dedicación, la ética y la vocación de servicio de quienes cuidan la salud de la población. La fecha se instauró en homenaje al médico cubano Carlos Juan Finlay, quien descubrió cómo se transmitía la fiebre amarilla. Su aporte marcó un antes y un después en la historia de la medicina.
En Misiones, la tarea médica está muy ligada al territorio. Muchos profesionales recorren largas distancias, atienden en zonas rurales y responden a emergencias. También sostienen la atención diaria en un sistema que, muchas veces, demanda más de lo esperado. Su trabajo incluye diagnósticos, tratamientos y también contención emocional para cada paciente y su familia.
El Día del Médico busca poner en valor ese esfuerzo cotidiano. Aun en medio de crisis sanitarias, dificultades económicas o falta de recursos, los profesionales mantienen su compromiso con el derecho a la salud. La fecha también invita a reflexionar sobre la necesidad de mejorar las condiciones laborales y fortalecer la formación médica.
El reconocimiento abarca todas las especialidades. Desde quienes trabajan en guardias, emergencias y terapias intensivas, hasta médicos de familia, pediatras, obstetras, clínicos, psiquiatras y cirujanos. Cada especialidad cumple un rol clave para que la atención sea integral y humana.
Este 3 de diciembre se convierte en una oportunidad para agradecer la entrega diaria de los profesionales de la salud. Su labor, muchas veces silenciosa, tiene un impacto directo en la vida de toda la comunidad.
Fuente principal: Organización Panamericana de la Salud (OPS) y antecedentes históricos del Día del Médico en América Latina.