Cada 19 de noviembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Abuso contra los Niños, una fecha destinada a visibilizar todas las formas de violencia que afectan a la infancia y a reforzar el compromiso de los Estados, las instituciones y la sociedad en su conjunto para garantizar la protección integral de niñas, niños y adolescentes.
La jornada surge como una iniciativa internacional orientada a promover políticas públicas, fortalecer los sistemas de prevención y fomentar el desarrollo de acciones comunitarias que permitan detectar, asistir y contener situaciones de vulneración de derechos. La Organización de las Naciones Unidas señala que el abuso infantil puede manifestarse de manera física, emocional, sexual o a través de la negligencia, y que sus efectos pueden perdurar durante toda la vida si no existe una intervención adecuada.
En Argentina, distintos organismos trabajan de manera articulada para prevenir este tipo de violencia, entre ellos los sistemas de protección de la niñez, los centros de atención territorial y las líneas de comunicación destinadas a recibir denuncias o consultas. Especialistas remarcan que la prevención requiere no solo la respuesta institucional, sino también la participación activa de las familias, las escuelas y las comunidades, ámbitos fundamentales para detectar señales tempranas de abuso o maltrato.
A lo largo del país, diversas organizaciones impulsan campañas de concientización, talleres y actividades educativas para promover entornos seguros y brindar herramientas que permitan abordar el tema con responsabilidad, perspectiva de derechos y sensibilidad social. El mensaje central de esta fecha apunta a recordar que la protección de la infancia es una responsabilidad colectiva y que cualquier vulneración debe ser acompañada con mecanismos efectivos de intervención y contención.
Fuente principal: Organización de las Naciones Unidas (ONU).